El mundo del toro se une en un acto reivindicativo para mostrar su repulsa a lo que entienden como una discriminación por parte del Gobierno con respecto al resto de industrias culturales durante la crisis del Coronavirus.

Profesionales y aficionados taurinos han salido a las calles de Málaga para mostrar su malestar por lo que entienden como una discriminación que el Gobierno de Pedro Sánchez ha hecho a la Tauromaquia a la hora de establecer las ayudas a la Cultura para paliar los efectos de la crisis del coronavirus. Matadores de toros, novilleros, ganaderos, empresarios, banderilleros, picadores, mozos de espada y, sobre todo más de un millar de aficionados, se daban cita a las 19 horas de este sábado en la plaza de la Merced.

La elección del lugar de inicio del Paseo Taurino, nombre que se le ha dado en distintas ciudades de todo el país a este movimiento reivindicativo, no era casual. Se buscaba exaltar el componente cultural de la tauromaquia en la misma cuna de quien fuera un gran aficionado: Pablo Ruiz Picasso. Así, por un día quisieron acercar al genio hasta esa fuente de inspiración para él como fue la plaza de toros de La Malagueta, donde concluía el acto.

Por primera vez en su historia, la gente del toro de Málaga y su provincia se unía para luchar por lo que para algunos es su afición, y para otros una forma de vida. Este es el caso de los diestros en activo que, a los sones de pasodobles taurinos como el insustituible en Málaga ‘Pan y toros’, encabezaban el ‘paseíllo’ tras una pancarta en la que se podía leer como lema único  “La Tauromaquia es Cultura”. Este era el caso de Saúl Jiménez Fortes, Salvador Vega, Fernando Rey, David Galán, Rafael Tejada o Javier Conde, rostros más significativos del escalafón local que se veían arropados por sus cuadrillas y antiguos profesionales como Francisco José Porras, impulsor principal de esta actividad; así como por compañeros foráneos como Manuel Escribano. 

En nombre de todos ellos intervenía para proceder a la lectura de un manifiesto Javier Conde, quien exponía que “nuevos poderosos pretenden prohibirnos”, pero advertía que “no podrán porque la Cultura no se censura, la Cultura no se puede limitar, la Cultura no se puede reprimir”. “La Cultura es riqueza, diversidad, rebeldía, conflicto y creatividad; pero sobre todo es libre y nos hace libres”, apostilló en un mensaje corroborado por sus compañeros.

Haciendo especialmente en el uso de mascarilla y el mantenimiento de la distancia de seguridad, voluntarios de la Plataforma #TambiénSomosCultura coordinaron un Paseo Taurino que discurría por calle Alcazabilla o el Parque antes de llegar a su destino final y que, aunque contó con el respaldo de representantes políticos, se quiso alejar de cualquier partidismo.

También intervino en el cierre de esta manifestación taurina el periodista malagueño Enrique Romero, director del popular programa ‘Toros para todos’ de Canal Sur Televisión, quien quiso lanzar un mensaje de fuerza, ya que “los prejuicios y la ignorancia no son argumentos sólidos para derrocar a la cultura y la costumbre de un pueblo”. “Somos arte, cultura, tradición, sentimiento y respeto; defensores del toro bravo, amantes del toreo”, manifestó antes de cerrarse el acto con los compases del Himno Nacional.