José Antonio Lavado ya es matador de toros. El primero de la historia de la Axarquía. El hasta ahora novillero de Benamocarra tomaba la alternativa de manos de José Garrido, y con David de Miranda, que resultó cogido, de testigo. El toro la ceremonia fue ‘Astuto’, con el hierro de Pallarés.

La esperada alternativa de Lavado, un fruto de la Escuela Taurina de la Diputación de Málaga, llegaba a las 19:48 horas. El animal había salido muy parado, y el ya matador de toros tenía que poner toda su raza para levantar la faena. Por momento lo logró, apostando primero por el toreo al natural, y posteriormente en redondo por la derecha, con pases con estética. Siempre en el tercio, la faena fue seguida con entusiasmo con un público entregado a su torero. Lástima que no entrara la espada, y todo quedara en una ovación.

Vestido de celeste y oro, quería que la tarde quedara para el recuerdo. Pero el toro no quiso. Se paró a las primeras de cambio tras el brindis a su compañero de fatigas Alejandro Sánchez, y no le quedó otra que embestir él. Lo puso todo, se la jugó con verdad entre los pitones, pero no era posible. Incluso pudo haber tocado pelo de haber matado a la primera. Tampoco en eso le ayudó el marmolillo de Pallarés.

La primera oreja del festejo fue para el padrino. Garrido lanceó con gusto a un toro interesante que fue de más a menos. El gusto del diestro extremeño quedó reflejado en tandas con ligazón por ambos pitones, a las que solo le faltó un poco más de ajuste para terminar de romper. Lamentablemente, como decíamos antes, el animal se fue parando y con ello la emoción de la faena. Eso sí, la suerte suprema fue decisiva y una buena estocada determinó la concesión del trofeo.

No se encontró cómodo Garrido en el segundo de su lote, un toro que embestía con la cara arriba y terminó por desconcertarlo. Pasó un quinario para terminar con él y fue silenciado.

En el sexto, que tuvo que estoquear por el herido David de Miranda, resultó un mansurrón ante el que tampoco hubo opción de lucimiento. Fue muy protestado, y supuso un triste epílogo a un festejo que debería haber dado mucho más.

Meritoria actuación de David de Miranda al tercero de la tarde, al que lanceó con gusto hasta rematar con dos medias verónicas en los medios. Ya con la muleta, plantó el engaño con decisión, siempre bien colocado, para exigirle desde un primer momento con la mano baja. Pudo pesarle al animal, de buena clase, pero que se paró pronto. El onubense optó por un valeroso arrimón, en el que recibía un pitonazo seco que le obligaba a entrar a la enfermería tras pasaportarlo. Precisamente con la suerte suprema fue con la que perdió la opción del triunfo. No pudo salir al tener que ser intervenido.

Esta es la reseña del festejo:

  • Plaza de toros de La Malagueta. Feria de Málaga 2023.
  • Segunda de abono.
  • Se lidiaron seis toros de Pallarés, bien presentados y de pobre juego.
  • José Garrido: estocada (oreja), cuatro pinchazos, estocada baja y descabello (silencio tras aviso), y tres pinchazos y descabello (silencio).
  • David de Miranda: estocada que hace guardia y cinco descabellos (silencio).
  • José Antonio Lavado (alternativa): estocada baja, pinchazo y media (ovación), y dos pinchazos y estocada (ovación).
  • Saludó tras banderillear al segundo Javier Valdeoro.
  • David de Miranda fue operado en la enfermería de la plaza de toros de “herida contusa de unos 8 cm en cara posterior de tercio superior de muslo izquierdo. Herida contusa de 5 cm en cara posterior de glúteo derecho sin afectación interna. Hematoma retroarticular derecho no expansivo. Pronóstico grave”.
  • La plaza registró dos tercios de entrada en tarde calurosa.