Los Jardines del Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos en el Paseo del Limonar han acogido en la tarde-noche de este miércoles 30 de julio una nueva edición del tradicional Pregón Taurino de la Feria de Málaga, que este año ha contado como gran protagonista con el gran aficionado José María Morente, director gerente del Área de Urbanismo del Ayuntamiento de Málaga.
La presidenta de la entidad colegial, Leonor Muñoz Pastrana, daba la bienvenida a este tradicional evento a los numerosos aficionados en un acto que contaba con la intervención de la diputada de Fomento María Nieves Atencia; la delegada del Gobierno de la Junta de Andalucia en Málaga, Patricia Navarro; y el Subdelegado del Gobierno en Málaga, Francisco Javier Salas.
Entre los asistentes se encontraban hasta cuatro delegados de la Junta, concretamente Miguel Briones, Fernando Fernández Tapia, Carlos García y Carmen Rosa Morales; así como el matador de toros Saúl Jiménez Fortes y componentes del Comité de Honor de este evento.
La participación institucional del Ayuntamiento de Málaga, representada por el alcalde Francisco de la Torre, se complementaba con la presentacion del pregonero; destacando su faceta investigadora dentro del mundo Taurino y Flamenco a través de su blog La razón incorpórea, así como sus logros profesionales al frente de actividades de gran responsabilidad como la de haber sido Director General de Urbanismo de la Junta de Andalucia.
El XXXI Pregón comenzaba con un breve recorrido por la evolución del toreo: desde el caos inicial hasta la organización racional instaurada por Francisco Montes Paquiro, figura clave que disciplinó la cuadrilla, definió los roles y contribuyó a crear el reglamento taurino que tuvo a Málaga como pionera en su aplicación, bajo el impulso de Melchor Ordóñez en 1847.
La historia taurina de Málaga se desgranaba en plazas legendarias previas a La Malagueta —como la de Álvarez— y festejos memorables, pasando por nobles locales, toreros míticos y anécdotas entrañables.
Morente reflexionaba sobre la evolución de las suertes taurinas: de las varas y la estocada como elementos esenciales, a la importancia actual del capote y la muleta, sin olvidar que lo esencial del toreo es la inteligencia y entrega del hombre frente a la bravura noble del toro.
Igualmente, el pregonero defendía un toro ágil, atlético y bien proporcionado, y elegía para su cartel soñado seis toros de los antiguos Pablo Romero, con tres toreros a gusto del público, resaltando la singularidad de la afición malagueña, abierta, hospitalaria y plural, que sabe apreciar todas las tauromaquias, desde la artística a la valerosa o la técnica.
Después de contrastar el ambiente y comportamiento de diferentes plazas (Pamplona, Sevilla, Madrid) y se ensalzaba el estilo propio de Málaga: un público que va a los toros con alegría, desde el paseo por El Parque hasta el respeto en la plaza, sabiendo ver, sentir y valorar el toreo desde el alma. “En Málaga se va a los toros después de ir a la Feria del Centro o la del Real”, exaltaba.
El pregonero destacaba figuras que han marcado la historia reciente de la Malagueta: desde Litri, Ordoñez, Manolo Segura, Miguel Márquez, Paquirri, Manzanares, Ojeda, Curro Romero, Paula, Joselito, Juli, hasta José Tomás; dedicando un sentido reconocimiento a Saúl Jiménez Fortes, malagueño puro y renovado, y a Morante de la Puebla, genio atemporal que revive suertes olvidadas con duende nuevo.
Cerraba el pregón con una firme defensa de la tauromaquia como expresión culta y popular, respaldada por la historia, la literatura y las artes; así como reivindicando el legado intelectual y artístico del toreo frente a los intentos revisionistas de la historia.
Finalizaba con una reflexión: a los toros, en Málaga, no se va a sufrir, se va a emocionarse, a disfrutar, a vivir el milagro del toreo con la ilusión de un niño y el saber de un anciano.
La ambientación musical corría a cargo de la Banda Municipal de Música de Málaga, que ofrecía un concierto en el que en honor al pregonero se interpretaba el pasodoble ‘Gallito’, de Santiago López, ademas de ‘La Concha Flamenca’ de Perfecto Artola. También se contaba con la participación de los clarines y timbales de la plaza de toros de La Malagueta, que realizaba los simbólicos cambios de tercio.
Esta es una galería dé imágenes del evento: