Tras cinco años de ausencia, Diego Ventura volvía a La Malagueta y lo hacía para salir por la Puerta Grande. Cuatro orejas, y dos peticiones de rabo, hacen una idea del espectáculo ofrecido por el número uno del rejoneo. Colaboró la corrida de Benítez Cubero y Pallarés en la que el veleño Ferrer Martín mostró la evolución de su toreo con el corte de otro trofeo; mientras que el portugués Ruiz Fernandes dio una vuelta al ruedo tras una actuación en tono muy menor. Lo de Ventura fue memorable e incontestable.

FOTOS: Arjona / Lances de Futuro

Se pidió con fuerza una oreja a Rui Fernandes en el primero de la tarde, por una actuación muy irregular en la que se dejó tocar en exceso las cabalgaduras. Tras poner banderillas cortas con ‘Herodes’, colocó el rejón de muerte en el costado del toro, más bajo imposible, provocando que rodara espectacularmente y fuera mal entendido por un público poco instruido en lo que son las suertes del toreo a caballo. El palco puso mesura, y todo quedó en vuelta al ruedo.

Faena pulcra y aseada de Fernandes al segundo de su lote, en una actuación que no levantó pasiones hasta la los compases finales con ‘El Dorado’ y ‘Engaño’ en banderillas al quiebro y cortas. Precisó de muchas pasadas en falso a lo largo de la lidia, en una actuación que no mantuvo el nivel de una tarde que hasta entonces estaba siendo entretenida. Se aburrió el toro, que se echó tras un pinchazo y fue apuntillado.

Para el recuerdo quedará la actuación de Diego Ventura en el primero de su lote ante el astado ‘Solícito’ de Benítez Cubero. Una faena completa de inicio a fin, desde el recibo en el rejón de castigo con ‘Velasques’, para seguir en banderillas con ‘Nómada’ y sobre todo con ‘Bronce’, al que quitó la cabezada nada más salir al ruedo, y con el que clavaba a una y dos manos con una exposición extremo y un dominio de la doma absoluto. Las grandes faenas hay que rematarlas por todo lo alto, como quedó el rejón de muerte colocado con ‘Guadiana’. Concedió directamente el presidente las dos orejas, e incluso se solicitó con insistencia un rabo al que se resistió. Mención especial al extraordinario juego de un toro que pudo ser premiado también con la vuelta al ruedo.

Con ‘Lío’ llegó otro ídem en el segundo del lote de Diego Ventura. Ante el primero de los toros lidiados con el hierro de Pallarés, volvío a mostrarse arrollador. Incontestable triunfo al que no se le pueden poner objeciones. Trementamente variado, puso banderillas al quiebro, y luego con ‘Guadiana’ reforzó el triunfo pareando a dos manos, clavando cortas al quiebro, y las rosas en todo lo alto. Otras dos orejas al esportón tras un rejón, algo trasero, pero contundente.

Ferrer Martín, rejoneador de Vélez-Málaga, regresaba por tercer año consecutivo a La Malagueta y, por tercera vez, volvía a puntuar. En su primero, además, se mostró como un torero más templado, asentado, y cada vez más capacitado. Recibió con ‘Libri’ y cerró con ‘Atlas’ una actuación que destacó por la buena colocación de las banderillas largas con los colores de la ciudad; así como las cortas con la enseña nacional. Justo premio el del apéndice que paseaba con satisfacción.

Otra buena actuación fue la que ofreció Ferrer Martín ante el segundo de su lote. Si llega a estar certero con los aceros, quien sabe si habría acompañado a Ventura en volandas por la Puerta Manolo Segura. Espectacular en la doma, conectando con un público entregado a su rejoneador, volvió a estar acertado en la colocación, ejecutando los tiempos a la hora de hacer las suertes. Dejó buenas sensaciones, una evolución positiva evidente, e hizo méritos para regresar a su plaza el año que viene.

  • Plaza de toros de La Malagueta. Quinta de abono. Corrida de Rejones.
  • Se lidiaron cuatro toros de Benítez Cubero y dos (5 y 6) de Pallarés. Correctos de presentación y colaboradores. Destacó el buen segundo.
  • Rui Fernandes: rejón bajo (vuelta al ruedo) y pinchazo (palmas).
  • Diego Ventura: rejón (dos orejas) y rejón (dos orejas)
  • Ferrer Martín: rejón casi entero (oreja) y pinchazo, medio rejón y descabello (vuelta al ruedo).
  • La plaza registró más de tres cuartos de entrada en tarde agradable.