Este pasado jueves 3 de febrero ha fallecido el empresario mexicano Alberto Bailleres, uno de los impulsores en 2015 de la Fusión Internacional por la Tauromaquia (inicialmente junto a Simón Casas y el que fuera gestor en esos momentos de La Malagueta José Cutiño).

Aunque nunca llevó la gestión directa de la plaza de toros de Málaga, hasta 2016 adjudicada a la sociedad Coso de Badajoz de Cutiño; sí que tuvo una vinculación con el coso taurino de nuestra capital dentro de lo que se presentaba como un «proyecto global empresarial» entre España, Francia y México para potenciar la Fiesta.

La Malagueta no ha sido la única plaza de la provincia que ha estado bajo la influencia de la FIT, también los festejos de Antequera también contaron con su organización en esos años, concretamente en las temporadas de 2015 y 2016.

Alberto Baillères González, de 90 años y considerado el cuarto hombre más rico de México, estuvo al frente de algunas de las empresas más fuertes del país en los sectores de minería, ventas minoristas, seguros, pensiones, entre otras.

Su pasión por la tauromaquia le hizo crear Espectáculos Taurinos de México (ETMSA), compaginando la propiedad y gestión de plazas de toros y el apoderamiento de toreros. Como ganadero, contaba con diferentes hierros en su país, adquiriendo en España el de Zalduendo.

Entre sus numerosas propiedades encontramos el megayate “Mayan Queen IV”, un buque de 140 millones de dólares en un casco de 93 m de eslora, que ha realizado diversas escalas en el puerto de Málaga, donde su presencia no ha pasado desapercibida.